Acompañado por su accesorio último modelo, se pavonea para todos lados. Chofer de sus amigas, se camufla en expresiones y modas jóvenes. Las busca a medida y cuando se gastan, las deshecha o les paga las cirugías. Vive a la misma velocidad con la que terminan sus relaciones. No le gustan los no y se asegura de evitarlos junto a coequipers menos experimentadas. Puede que encuentre a la joven dócil tipo chica Disney y su sueño se realice, siempre y cuando no le salga el tiro por la culata y ella, más buena que nunca, lo abandone por su instructor de Pilates.
4. El dominado (¿Para qué describirlo? Véase la dominante)
5. El ex que todavía te desea
Tras su aspecto superado notás que cuando no lo ves te echa una mirada de aquéllas y ante tus movimientos femeninos se queda perturbado. Es como una olla a presión que no puede salir o que se desquita con otra que tiene tu cara. Tal vez queden como “amigos” y un día, deja vu mediante, te alcance a tu casa. Entonces segura de que si le tirás una soga, se encaramaría cual Tarzán, hacé memoria y acordate que los motivos por los cuales no funcionó siguen ahí esperándote.
Compatible con la que tu ex tiene.