Dicen que las mujeres no son todas iguales, por eso he aquí un catálogo de mujeres:
Hace como ocho años, cinco meses y dieciséis días que están de novios. Los dos estudiaron, se recibieron y consiguieron trabajo, es decir que todas las razones esgrimidas durante años ya no pueden dilatar el ansiado final, el broche de oro de sus vidas. Pero él nada, ni mu acerca del asunto y ella no piensa seguir papando moscas hasta perder la cordura y la fertilidad. Entonces un día, hastiada por tanta calma, le pregunta qué pensaban hacer al respecto, qué esperaban (¿la muerte?) y él no tuvo mejor idea que contestarle que primero se compraran un terreno y se hicieran la casa. Resignada aceptó, terminaron de hacer la casa y sí, entonces, se pelearon.
5. La despechada
Va por la vida hecha una sombra, como si tuviera sobre su cabeza una nube permanente cargada de lluvia y tormenta. Se consume por dentro recordando los más mínimos hechos y detalles, determinando culpables y castigos. Con la cola entre las patas piensa verlo algún día regresar, para altiva y triunfadora decirle que no, que ya no lo necesita y poder tararearle una letra de Pimpinela.
6. La que sigue enamorada del mismo
Pasan los años de su vida y ella sigue enamorada del mismo perejil que nunca le dio bola. Está con otros, pero no, ninguno se parece a él, ninguno sonríe como él, habla como él, camina como él… Se sabe toda su vida, lo adora más que a cualquier actor de Hollywood y si él la dejara sería capaz de darle todo. Sus amigas no saben qué hacer, intentan convencerla de que es un idiota, un vago y un mujeriego, pero ella enceguecida niega todos los cargos y sólo ansía el momento en que él le devuelva una mirada. Finalmente, un día él se le acerca, la mira a los ojos y le habla suavemente, y entonces ella, luego de verle un trozo de comida entre los dientes, descubre que después de todo, él era uno más del montón.